

En medio del ajuste fiscal impulsado por el presidente Javier Milei, los municipios bonaerenses se ven cada vez más afectados por la caída de los recursos coparticipables y la merma en los ingresos propios. En este contexto, varios intendentes se vieron obligados a implementar recortes en los sueldos de funcionarios, concejales y trabajadores estatales.
Uno de los casos más significativos es el del municipio de Saavedra-Pigüé, donde se aplicó una reducción del 13 por ciento en los haberes de funcionarios, concejales y empleados municipales. El intendente Matías Nebot justificó la medida como parte de un plan de austeridad necesario para “evitar un mal mayor, que es no poder afrontar el pago de sueldos”.
El ajuste fue aprobado en asamblea por los propios trabajadores municipales y se fundamenta en el déficit económico que arrastra la comuna desde 2019, agravado en el último año por las políticas de recorte implementadas por el Gobierno nacional.
Provincia en rojo
En Guaminí, el intendente José Augusto Nobre Ferreira también adoptó medidas drásticas frente a la caída de los recursos coparticipables, situación que se ve aún más comprometida por una emergencia hídrica que impactó en la infraestructura rural.
Entre las medidas adoptadas se incluyen el congelamiento de salarios, la limitación de horas extras, la suspensión de subsidios y la revisión de contratos vigentes. Sin embargo, se mantuvo el pago de haberes con un aumento del 7,5 por ciento al salario básico correspondiente a abril.
A nivel provincial, la situación también es crítica. En el primer trimestre de 2025, la provincia de Buenos Aires registró una caída del 19,4 por ciento en la coparticipación federal en términos reales, en comparación con el mismo período del año anterior.
La fuerte retracción de la actividad económica, sumada a una inflación acumulada del 51,6 por ciento entre enero y marzo, ha reducido de forma drástica los ingresos disponibles para los municipios, que dependen en gran medida de estos fondos para sostener su estructura administrativa y los servicios esenciales.