Con el fin de año acechando al Gobierno, este martes el Congreso pone en marcha la maratón legislativa de la semana de fuerte voltaje político con dos convocatorias a sesión especial, ambas que incomodan al Gobierno.

Por un lado, una reforma sindical que el oficialismo acompaña en disidencia en un guiño a la CGT; y por otro, el segundo intento de la oposición para voltear el DNU de canje de deuda, en medio de la disputa de los gobernadores con el Gobierno por el Presupuesto 2025.

Así se dará inicio a la última semana de sesiones ordinarias en el Congreso, que tiene en agenda más sesiones calientes. Mañana el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, expondrá por primera vez en el Senado, luego de los embates de Javier Milei contra Victoria Villarruel.

En tanto, mañana Diputados discutirá proyectos para regular las apuestas online y prevenir la ludopatía, mientras que el jueves llega el plato más fuerte con el proyecto de Ficha Limpia, luego del fracaso de la semana pasada por la división entre PRO y los libertarios.

Primera parada

Este martes a las 13, el radical Martín Tetaz buscará contra viento y marea, que avance su proyecto de reforma sindical. El proyecto viene de un conflicto en comisión, ya que el oficialismo le quitó el apoyo luego de acordar con la CGT.

Se trata de una iniciativa que limita el financiamiento vía las cuotas sindicales y le pone tope a los períodos de los secretarios gremiales, entre otros puntos. Sin embargo, Tetaz atraviesa el desafío de conseguir los 129 apoyos para el quórum y luego, de lograrlo, que sea votada. Panorama que parece lejos.

Más tarde, a las 15, la oposición intentará voltear el DNU 846/24 que habilita el canje de deuda en pesos sin autorización previa del Congreso. Es una discusión atravesada por las negociaciones de los gobernadores por el Presupuesto 2025, que Milei ya congeló y no tendría intenciones de que efectivamente avance. Otro quórum que se mantiene en duda.

El plato fuerte del Congreso: Ficha Limpia

La caliente semana legislativa terminará el jueves en Diputados con la nueva convocatoria del PRO para insistir con su proyecto de Ficha Limpia. Ahora, los amarillos buscan sortear la crisis que se abrió la semana pasada con el oficialismo cuando cayó el quórum por la ausencia de propios y ajenos.

En la bancada oficialista, dan por descontado que sus legisladores bajarán al recinto, sin embargo en el PRO temen que algunos se ausenten de la sesión convocada para las 10 hs y repetir la historia por la que el presidente del cuerpo, Martín Menem, cosechó varias críticas.

Es que, aunque varios diputados libertarios firmaron el nuevo pedido, el tema no está entre las prioridades del Gobierno. Así lo dejó entrever el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien puntualizó que está “de acuerdo con la sustancia, pero no con la circunstancia”.

Así las cosas, el temor de Mauricio Macri, es que en el Gobierno haya un silencioso intento por frenar el debate del proyecto que pone en peligro la acción política de Cristina Fernández de Kirchner en pos de intereses políticos como la asignación de Ariel Lijo en la Corte.

Cabe recordar que, si se sancionara la Ley de ficha limpia, la expresidenta no podría ser candidata el año próximo en las elecciones legislativas, tras confirmación de la Cámara de Casación Penal a 6 años de prisión e inhabilitación de por vida a cargos públicos.