En otra ola de desregulación, el Gobierno nacional eliminó los precios máximos para las garrafas del Programa Hogar. La decisión generó una fuerte preocupación respecto a los sectores más vulnerables y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, salió a defenderlos.

La medida impulsada por la Secretaría de Energía apunta a desregular el mercado del Gas Licuado de Petróleo (GLP), iniciando por el programa que buscaba garantizar el acceso al gas en hogares de bajos recursos, especialmente aquellos que no tienen acceso a la red de gas natural.

Al conocer la noticia, Kicillof volvió a pararse en la vereda del frente de Javier Milei y publicó: “Definición de un Gobierno cruel, al que no le importa la gente (aclaración: no es “libertad” sino beneficiar a unos pocos con los bolsillos de millones que no dan más)”, afirmó.

Definición de un Gobierno cruel, al que no le importa la gente (aclaración: no es “libertad” sino beneficiar a unos pocos con los bolsillos de millones que no dan más). pic.twitter.com/Z8YL8GEwDm

— Axel Kicillof (@Kicillofok) August 20, 2024

Golpazos al bolsillo

El Programa Hogar subsidiaba aproximadamente el 80% del costo de las garrafas de 10, 12 y 15 kilos, lo que permitía que las familias accedieran al gas a bajo costo. Sin embargo, el Gobierno borró los precios máximos y estableció en su lugar un “precio de referencia” para las garrafas.

De esta manera, la medida impacta de lleno en el bolsillo de la gente que deberá afrontar la totalidad de los costos de un rubro que no es ajeno a los aumentos generalizados. Las garrafas de 10 kg, por ejemplo, sufrieron una suba del 31,8% respecto al primer trimestre del año, lo que elevó su precio a $8.500.

Mientras tanto, desde el Gobierno libertario justificaron que la decisión se centra en “dejar de obstruir el ejercicio de las libertades individuales en el ámbito contractual”, con la lógica de que la desregulación fomentará la competencia y, una mejora en la eficiencia económica del sector.