

A contramano de los discursos negacionistas impulsados por el Gobierno nacional, el intendente de La Plata, Julio Alak, encabezó un acto de reparación de los legajos de dos trabajadores del Mercado Central Regional desaparecidos en la última dictadura cívico militar.
Se trata de Carlos Damián Perego y Alberto Perego, quienes fueron declarados como cesantes en su labor cuando en verdad habían sido ilegalmente detenidos.
Acompañado por los hijos de los trabajadores homenajeados, Alak celebró el “acto de justicia” al reparar los legajos y enfatizó: “Hoy se pone la causa real, que es desaparición y muerte en la dictadura”.
En ese marco, agregó: “Esto reafirma que los principios de memoria, verdad y justicia deben sostenerse; es un acto de justicia que, felizmente, congrega a todos los sectores que luchamos por la igualdad, la justicia social y una patria libre, justa e independiente”.
Cabe destacar que este acto dio inicio a una política de reparación de legajos de trabajadores municipales que se sostendrá a través del relevamiento, la investigación y el vínculo con los familiares para contribuir al esclarecimiento y la reparación de los crímenes de la dictadura.
Carlos y Alberto Perego fueron trabajadores del Mercado Regional de nuestra ciudad y militantes políticos detenidos y desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar. Hasta hoy sus legajos figuraban como "cesanteados" como si hubiesen ausentado su trabajo, cuando en… pic.twitter.com/yn45lx4Xyj
— Julio Alak (@Julio_Alak) June 24, 2024
La historia de los trabajadores
Carlos Damián Perego, conocido como el “Cabezón” y “Coquito”, fue secuestrado y desaparecido el 29 de julio de 1976, a los 25 años, en su casa de La Plata. Casado y con un hijo, fue secretario general de la Unidad Básica del Barrio “El Churrasco” de Tolosa y trabajaba como empleado en el Mercado Regional de La Plata.
Su compañero Alberto Osvaldo Perego fue secuestrado y desaparecido el 11 de octubre de 1977, a los 25 años. Era militante de la Juventud Peronista y empleado en el Mercado Regional de La Plata.
Para recordarlos, Alak cerró: “La reparación de sus legajos es un acto de memoria y de justicia, y el inicio de un programa municipal de trabajo para recuperar la historia trabajadora y militante de nuestra ciudad, muchas veces invisibilizada”.