La baja al 3,4% en la inflación minorista de abril aportó una señal positiva de cambio de tendencia que “podría profundizarse” en los próximos meses, sostuvo el Banco Ciudad en su informe semanal.

“Si bien la variación que mostraron los precios el mes pasado continuó siendo elevada, la desaceleración con respecto al dato de marzo aportó una positiva señal de cambio de tendencia, que podría profundizarse en el mes de mayo”, sostuvo el banco porteño.

En términos interanuales, la variación del IPC del INDEC fue del 55,8%, mientras que en los cuatro primeros meses del año acumuló un incremento de 15,6%.

La desaceleración se sintió, mayormente, en los precios estacionales, que pasaron de una variación del 4,8% al 1,6%, por descensos en frutas y verduras, como así también en la categoría de precios regulados (desde un 4,9% a un 3,3%), entre otras cosas, por el desdoblamiento del aumento en las tarifas de gas entre los meses de abril, mayo y junio.

La inflación núcleo también se desaceleró, aunque en menor cuantía, de 4,6% a 3,8%. La variación en los precios de los alimentos “resultó de 2,5%, muy por debajo del 5% promedio registrado en el primer trimestre del año”, indicaron desde el Banco Ciudad y añadieron que abril se vio favorecido por un aumento “mucho más moderado” en el precio de la carne y derivados, que para el Gran Buenos Aires se situó en 1,7%, frente a un 10,3% en febrero y 9,2% en marzo.