La Gobernadora, María Eugenia Vidal, mandó un mensaje ante la Asamblea Legislativa con el foco puesto en encarar su último año de mandato y con la idea de revalidar su gestión en las urnas.

Con la presencia de todo el Gabinete bonaerense y presencia de algunos intendentes, el mundillo político de la Provincia vivió con expectativa el discurso de la mandataria.

“¿Qué cambió?”, comenzó Vidal y se respondió “cambiaron los bonaerenses”, en línea con lo dicho por Macri por la mañana y quien puso el foco en “un sistema oxidado”.

En ese sentido, Vidal resaltó que “ya no se oculta la verdad” y recalcó la idea de las elecciones y una ´idea´de “realidad”.

El primero de los balances, Vidal hizo foco en el trabajo de la Legislatura y remarcó las iniciativas de transparencia, aunque sólo se avanzó en la eliminación de las jubilaciones de privilegio y la presentación de las declaraciones juradas de los legisladores.

Uno de los puntos calientes, y apuntando a Macri, Vidal insistió con el Fondo Del Conurbano y lo calificó como “no es negociable”.

En otro punto, la mandataria señaló una serie de obras “que le dejaremos al próximo gobierno”, lo que puede leerse como una despedida de su mandato y puso en modo sorpresa a más de uno en las primeras filas de invitados.

Con un paralelismo con la gestión de Daniel Scioli, la mandataria volvió a hacer una comparación con “el pasado” y, de manera insólita, remarcó que adelantó el aguinaldo, algo estipulado por ley desde 2014.

Por otro lado, Vidal puso el modo electoral en encendido y mandó mensajes a la clase media, quienes son su principal votante, y remarcó los descuentos con el BaPro.

En ese sentido, también le dio un guiño al campo y destacó la cosecha de “trigo, maíz y cebada, gracias  a que los productores se pusieron la tarea al hombro”.

“La mitad de los cargos designados por la Justicia, además de esta Legislatura, la mitad serán ocupadas por mujeres”, entabló.