El jefe del bloque de Unión por la Patria, José Mayans, lanzó duras críticas al Presupuesto 2026 promovido por el Gobierno nacional en la previa de su tratamiento en el Senado, y aseguró que el proyecto “no debería haber superado la instancia de comisiones” debido a irregularidades en su tratamiento legislativo.

En esa línea, advirtió que el debate acelerado de “una ley de semejante magnitud en un plazo reducido y concentrado en una sola jornada desnaturaliza el rol del Congreso y compromete el debate democrático”.

El legislador cuestionó además la conformación de las comisiones y aseguró que el proceso estuvo “viciado desde su origen”. Y agregó: “Si hubiesen hecho las cosas en forma reglamentaria, hoy no tenían despacho y seguíamos discutiendo el presupuesto punto por punto, como corresponde”.

También apuntó contra el contenido del proyecto y señaló que el tratamiento exprés busca evitar controles. A su entender, se impide un análisis profundo del impacto real de las partidas y los recortes previstos, lo que debilita el sistema republicano.

Sobre el endeudamiento público, Mayans denunció que el Ejecutivo intenta incluir nuevas autorizaciones de deuda sin el debido debate parlamentario y criticó la intención de eliminar la Ley Guzmán. Y cargó contra el ministro de Economía, Luis Caputo, por no asistir al Congreso: “refleja una decisión política de esquivar el control” legislativo, dijo.

En esa línea, puso el foco en la deuda previsional que la Nación mantiene con las provincias. “La Nación debe cifras siderales. En particular, a la provincia de Buenos Aires le debe casi 13 billones de pesos, y después hablan de superávit. Es absolutamente mentiroso: el superávit está dibujado”.

Alertó además por los recortes en áreas estratégicas como educación, ciencia y tecnología, y cuestionó la eliminación de herramientas de financiamiento histórico tras considerar que el Presupuesto otorga al Ejecutivo una discrecionalidad incompatible con el equilibrio de poderes.

En relación al impacto social, el senador describió un escenario de deterioro salarial y pérdida del poder adquisitivo, con efectos directos en el consumo y la vida cotidiana. También advirtió sobre la paralización de la obra pública nacional y el abandono de las provincias.

Por último, de cara a la votación, señaló la preocupación de varios gobernadores y cuestionó el posible respaldo de sectores opositores.