Luego del encuentro de los intendentes del Frente Renovador en General Las Heras con el propio Sergio Massa, desde el sector mandan un mensaje al corazón del peronismo y ponen su posición para garantizar los próximos pasos que debe dar la oposición con los desafíos que se presentan para el futuro.

En ese marco, el intendente de General Las Heras, Javier Osuna, compartió sus impresiones con La Letra Chica tras un encuentro de la “familia renovadora” en el que se hizo un balance del año y se delinearon pautas futuras.

Osuna explicó que la reunión, que duró unas cuatro horas, se realizó para hacer un balance y “fijar algunas pautas” para el año próximo.

El objetivo central de la reunión fue analizar la mirada sobre la situación del país desde los distintos niveles de gestión; organizarse para “construir en el futuro una alternativa posible a nivel nacional” y “mantener la provincia de Buenos Aires y los municipios”.

Sobre uno de los puntos salientes del peronismo durante el 2025, Osuna destacó que se abordó la discusión sobre la unidad del peronismo, calificándola como un “capital que no podemos perder”, pero advirtiendo contra las formas ineficaces de cohesión.

“No te sirve la unidad en el marco de un amontonamiento... si cerramos una unidad para cerrar una lista pero después no logramos un funcionamiento más ágil, más organizado y menos conflictivo en el día a día, uno pierde potencia”, remarcó.

Osuna destacó que el peronismo necesita una revisión de temas y un “equipo sólido y rápido” para reaccionar a la velocidad de las políticas y la era tecnológica actual.

Osuna utilizó el rol de intendente para reclamar con más fuerza sobre los problemas que la gente les pide, poniendo el foco en la educación y la comunidad, que tienen que ver con la educación, el trabajo con la comunidad, la revitalización de las instituciones intermedias, como foco del trabajo articulado entre la sociedad civil y el Estado.

“Hoy no estamos en una generación mejor educada que hace años atrás. Los chicos tienen problemas de aprendizaje, lo cual no es solo responsabilidad de los docentes, sino de factores socioeconómicos, familiares y tecnológicos”, destacó.

Además, diagnosticó que “los jóvenes que salen de sexto grado sin leer o comprender un texto están condenados”. Esto no es un certificado de egreso, sino un “certificado de pobreza”.

El intendente enfatizó que estos temas son los que la gente reclama, señalando la necesidad de reordenar lógicas a nivel provincial y nacional para reconstruir la educación y la institución familiar/comunitaria.