El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se refirió a la Ley de Financiamiento recientemente aprobada en Diputados, aclarando que no se trata de nuevo endeudamiento, sino de la refinanciación (roll over) de vencimientos de la deuda contraída durante la gestión de María Eugenia Vidal.

Kicillof presionó al gobierno nacional para que agilice el proceso administrativo necesario para la refinanciación. “La ley se llama de financiamiento y simplemente cubre los vencimientos que tiene la provincia del endeudamiento que viene de la época de Vidal. Que lo aprueben y rápido, ni bien lo mande. Rapidito Toto por favor. Que apruebe que lo que tiene que aprobar porque ya más lío no pueden armarnos”, sostuvo.

El gobernador elevó el tono contra el Presidente y los legisladores de La Libertad Avanza, a quienes acusó de hablar sin fundamentos y de ser cómplices del desfinanciamiento provincial.

Kicillof afirmó que la Nación les “debe 13 mil millones de pesos” y exigió a los legisladores libertarios que pidan a sus “amigos y socios que nos devuelvan la plata que le robaron a la Provincia”.

Además, recordó que la Provincia está reclamando ante la Corte Suprema de Justicia para que “nos devuelva Milei lo que le robó, no a este Gobernador ni este gobierno, sino a los y las bonaerenses”.

Kicillof atribuyó directamente la crisis económica al plan del Gobierno Nacional, utilizando datos concretos de recaudación, marcando que “hubo una caída muy grande de la recaudación este último mes de noviembre, 8,9% cayeron los recursos coparticipables, por el desastre económico que genera Milei con su plan”.

El gobernador lamentó que, mientras “Wall Street, que Scott Bessent, que Trump, los gringos” festejan, el problema real es el cierre de comercios y plantas industriales en toda la provincia, con gente que se queda en la calle.

Kicillof finalizó su mensaje con un llamado directo a Javier Milei para que priorice los problemas internos del país. “Que se haga cargo de lo que se tiene que hacer cargo: de los argentinos. No de los israelíes o de los yankees, de los argentinos”, sostuvo.

“Que se ocupe de cada fábrica que cierra, de cada comercio que no vende, el problema de importaciones, la caída de sueldo... Necesitamos que se ocupe, un poco aunque sea mínimamente, una parte de su jornada, que abandone esto de andar viajando y recibiendo premio y que se ocupe de sostener el trabajo y el salario en la Argentina”, finalizó.