El bloque de diputados PRO bonaerense salió a dar explicaciones sobre su postura luego de la votación que finalmente habilitó el endeudamiento solicitado por Axel Kicillof.
“Ser oposición a un gobierno no significa que debamos obstaculizar todo”, dejaron en claro en el comunicado. Y detallaron: “Votar lo que está bien, no votar lo que creemos que no y decirlo en el lugar institucional correcto. Eso hicimos”.
Además, remarcaron que su comportamiento se apoyó en dos principios centrales: “la responsabilidad fiscal” y el compromiso con un “control estricto para evitar el despilfarro del kirchnerismo”.

Asimismo, aclararon: “No acompañamos la autorización de nueva deuda, ya que no venía con el destino específico de inversión”. Y sumaron que negarse al refinanciamiento hubiera sido “irresponsable con el futuro de los bonaerenses”.
Otra parte del comunicado apuntó a acusaciones sobre presuntos beneficios políticos a cambio del acompañamiento legislativo. El PRO negó de plano esa interpretación y aclaró que los cargos votados en organismos colegiados fueron simplemente renovaciones de los lugares que le corresponden a la oposición.
“No se agregó ningún cargo nuevo para el PRO ni se amplió la estructura”, expresaron. Recalcaron además que la presencia opositora en espacios como el Banco Provincia o el Consejo General de Educación forma parte de los controles institucionales previstos por la Constitución.
El espacio también reivindicó haber dado el debate en el recinto. Allí sostuvieron que su rol no es bloquear toda iniciativa del oficialismo, sino actuar con coherencia respecto de sus convicciones.