Finalmente, la Legislatura bonaerense convirtió en ley el Presupuesto 2026 que concentra una inversión total superior a los $43 billones y marca las prioridades del Gobierno de Axel Kicillof para el próximo año.

Uno de los núcleos centrales es la obra pública, que contará con $3,2 billones. Los fondos impulsarán el Programa Escuelas a la Obra, trabajos de urbanización, mantenimiento vial y la construcción de plantas potabilizadoras y redes de saneamiento.

La propuesta también prevé pavimentación en corredores productivos y la continuidad de los planes hídricos del Gran La Plata y Bahía Blanca–Coronel Rosales.

En protección social, la proyección fija $1,7 billones para asistencia alimentaria y programas vinculados al SAE y al módulo extraordinario destinado a familias en situación crítica.

El área de salud recibirá otros $1,7 billones para infraestructura hospitalaria, equipamiento y la continuidad de Medicamentos Bonaerenses y la cobertura del Instituto Provincial del Cáncer.

Educación tendrá a disposición $1,3 billones orientados a la universalización de la jornada completa, la sala de 3 años como parte de la educación obligatoria y obras para el sistema universitario provincial.

En seguridad, el presupuesto asigna $1,4 billones para fortalecer a la Policía bonaerense y al Servicio Penitenciario en infraestructura, logística y equipamiento.

El paquete económico incluye además $60.000 millones para políticas de apoyo al sector productivo, con foco en pymes y actividades estratégicas.

Por último, el texto crea un Fondo de Recupero de Deudas del Estado Nacional, destinado a concentrar los recursos que la Provincia reclama al gobierno de Javier Milei y que aún permanecen impagos.

De esta manera, el Presupuesto pretende priorizar la necesidad de “sostener la estabilidad fiscal”, proteger a los sectores más vulnerables y mantener el ritmo de inversión en infraestructura y producción.