Tras la renovación de autoridades en su Congreso Nacional, la Confederación General del Trabajo (CGT) envió un mensaje contundente al Gobierno nacional sobre la reforma laboral.
El flamante cosecretario general, Cristian Jerónimo (Sindicato del Vidrio), advirtió que la central obrera no acompañará ninguna modificación que implique una "quita de derechos" o un carácter “regresivo”.
Jerónimo, uno de los integrantes del nuevo triunvirato de la CGT, fue tajante al señalar los límites para cualquier modernización laboral impulsada por el Ejecutivo.
“No vamos a aceptar ninguna propuesta alocada del Gobierno” y “no vamos a aceptar ninguna propuesta que sea regresiva con quitas de derechos”, fueron las sentencias del nuevo cosecretario general.
Jerónimo enfatizó que cualquier reforma debe utilizar los convenios colectivos como la vía para la modernización y dejó en claro que la CGT no aceptará propuestas que impliquen jornadas de 12 horas o salarios atados a la productividad.
El mensaje del nuevo jefe cegetista se dirigió directamente a la visión presidencial sobre el desarrollo económico: “Si el Presidente plantea que el país esté entre los países desarrollados, que empiece por respetar los derechos de los trabajadores”.
La advertencia de Jerónimo marca el inicio de una etapa de alta tensión entre el Gobierno de Javier Milei y la central obrera en torno a la agenda legislativa de reformas.