

El director ejecutivo de la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), Cristian Girard, cuestionó la visión oficialista sobre el equilibrio fiscal, la carga tributaria y la distribución de recursos.
Sobre el creciente temor en los mercados financieros respecto de la sostenibilidad de la deuda, Girard advirtió: “Creo que es uno de los riesgos que tiene delante este Gobierno. El mercado evalúa riesgos y lo que está leyendo es que hay inconsistencias en el programa económico. No es un riesgo ‘kuka’”.
Respecto al déficit, el funcionario de Axel Kicillof rechazó los calificativos del presidente Javier Milei hacia los gobernadores como “degenerados fiscales” por negarse a profundizar el ajuste.
“A lo que nos negamos es a tener obra pública cero, a recortar programas de asistencia social en medio de una crisis, a desfinanciar la salud y la educación. El degenerado fiscal es el que le hace pagar el costo del ajuste a jubilados, empleados públicos y a la clase media”.
Poder político
Girard explicó que el déficit y el superávit deben entenderse como instrumentos de política económica. “Nadie en nuestro espacio está enamorado del déficit fiscal, como quieren hacer creer. Un superávit puede lograrse incluso impulsando la inversión pública si ésta genera un crecimiento que aumente la recaudación”.
En ese marco, señaló que las elecciones legislativas serán decisivas para el devenir del Gobierno nacional: “Si el oficialismo pierde, empieza una transición democrática hacia 2027. Se terminará el acompañamiento que Milei logra en el Congreso con el toma y daca, y se verá a un presidente desempoderado”.
Para cerrar, el titular de ARBA advirtió que el oficialismo podría quedar debilitado si se frena su capacidad de avanzar con reformas: “No va a poder profundizar el daño que viene haciendo. En la Provincia de Buenos Aires seguro que no. La gente no va a soportar la profundización de este esquema”.