El Frente de Izquierda y de los Trabajadores Unidad (FIT-U) lanzó su campaña electoral con una dura doble crítica: no solo se posicionó como la única alternativa real al gobierno de Javier Milei, sino que también acusó al gobernador Axel Kicillof de aplicar el mismo ajuste y de no ser “ningún escudo” para los trabajadores bonaerenses.
La candidata a diputada provincial por la Octava Sección, Laura Cano, calificó el cierre de listas de las otras fuerzas como un “espectáculo obsceno”.
En una entrevista con La Letra Chica, afirmó que tanto el oficialismo libertario como el peronismo “dejan claro que la agenda de las y los trabajadores no la tienen como prioridad, sino que lo que tienen como prioridad es el lugar en la lista”.
El principal eje de la crítica de la izquierda apuntó directamente a la gestión de Kicillof, a quien acusan de tener un doble discurso. “Kicillof dice ser un escudo frente al Gobierno nacional y lejos de ser un escudo, se alía con personajes de la burocracia sindical como Daer o Andrés Rodríguez, que han sido cómplices del ajuste de Javier Milei”, disparó Cano.
La dirigente fue aún más lejos y comparó al gobernador con su antecesora. Denunció que Kicillof “aplica el descuento a los trabajadores de la docencia que han ido a paro (...) así como lo hizo Vidal, descuenta el día de paro una medida absolutamente anticonstitucional, incluso atentando el derecho a huelga”.
Cano también se quejó de las condiciones desiguales de la contienda electoral, a la que calificó como una elección “con cancha inclinada”. Explicó que deberán hacer una campaña “a pulmón” y “contracorriente” porque no contarán con financiamiento para espacios gratuitos en radio y televisión.
A pesar de las dificultades, la candidata defendió el voto a su espacio como la única herramienta útil para los trabajadores.
“El voto del Frente de Izquierda consideramos que es la manera más filosa de denunciar lo que está pasando”, sostuvo. Y remarcó la coherencia de sus representantes: “Nuestros compañeros y compañeras, cuando ocupan esas bancas, no se dan vuelta, no panquequean, están siempre del mismo lado”.
Finalmente, concluyó que la elección del 7 de septiembre es solo “una estación en toda la lucha que nos va a tocar por delante frente a un gobierno nacional aliado al FMI y a un gobierno provincial que lejos de preocuparse por las demandas del pueblo trabajador, aplica el ajuste sobre la clase trabajadora”.