

En medio del debate por la precarización laboral de los trabajadores de aplicaciones, en La Plata surgió un modelo alternativo que busca demostrar que es posible garantizar derechos y beneficios.
Se trata de la cooperativa de trabajo "Mi Ciudad", una organización creada por los propios repartidores que se diferencia de las grandes plataformas como Rappi o PedidosYa al ofrecer obra social, aportes jubilatorios y hasta el pago por días de lluvia.
Nazareno Salguero, referente de la cooperativa, explicó en el programa Diagonal a Contramano cómo nació esta iniciativa. “Nosotros somos repartidores de toda la vida y creamos, a través de nuestra organización, un modelo de trabajo que se llama Mi Ciudad, y lo pudimos conformar como cooperativa de trabajo”, relató.
A diferencia de las aplicaciones tradicionales, el modelo de "Mi Ciudad" pone los derechos laborales en el centro. Según Salguero, el pago a los trabajadores se actualiza según el índice de la canasta básica y lo supera.
Además, cuentan con una serie de beneficios que son impensados en el sector. “Se paga el feriado, se paga la lluvia, se paga el peso, se paga el retorno, el tiempo de espera”, detalló.
Pero los derechos no terminan ahí. La cooperativa garantiza que cada trabajador tenga “un seguro de vida, un seguro de accidentes personales, que tengan un monotributo social para no perder beneficios, y así tienen acceso a una obra social y aporte jubilatorio”. Además, cuentan con un espacio físico para capacitación e incluso un "gomero móvil" que les arregla los parches de las ruedas de forma gratuita.
Por iniciativa de Cristian Vander, los concejales de La Plata buscan ponerle un freno a la precarización laboral que afecta a miles de trabajadores del sector y presentaron formalmente un proyecto de ordenanza para regular la actividad de los repartidores de aplicaciones de delivery en la ciudad.
El próximo objetivo de la cooperativa es aún más ambicioso: pagar el aguinaldo. “Buscamos tratar de darle el aguinaldo a nuestros trabajadores. Es una tarea muy difícil, pero por algo se empieza. Ya hemos conquistado un montón de cosas”, afirmó Salguero.
Finalmente, el dirigente resumió la filosofía detrás de su reclamo, que es a la vez una propuesta concreta. “No estamos pidiendo nada raro. O sea, estamos pidiendo lo que corresponde. Que el trabajador tenga los derechos y los beneficios que corresponden y que cobre lo que corresponde”, concluyó. Y cerró con una advertencia: “No podemos permitir que siga todo desordenado, todo así nomás”.