

El exvicepresidente de Argentina, Amado Boudou, reapareció en la escena política con una postura clara sobre la interna peronista. Pese a que afirmó no querer “atacar” al gobernador Axel Kicillof, reprochó su “no ordenamiento” bajo la figura de Cristina Fernández de Kirchner.
La resolución de la interna del Partido Justicialista nacional con el rechazo de la lista de Ricardo Quintela y la proclamación de CFK como nueva conductora, no terminó de enfriar los conflictos. La braza que quedó encendida es la de las críticas a Kicillof.
Tras semanas de críticas a cielo abierto desde el cristinismo por la falta de pronunciamiento del gobernador a favor de la lista de la expresidenta, Boudou bajó en paracaídas a sumar su punto de vista, con más palos para Kicillof.
Para el dirigente, lo que esperaba gran parte del movimiento era que una vez que CFK apareciera “con la posibilidad de ordenar el futuro”, hubiera un apoyo fuerte y unánime a su favor “y no medias palabras y medias tintas”.
Boudou defendió a capa y espada los cuestionamientos al gobernador y negó que se tratara de un ataque. Por el contrario, insistió en reprochar un supuesto “no ordenamiento de la fuerza alrededor del ordenamiento que proponía Cristina”, que le resulta indispensable.
En ese marco, reflexionó sobre la importancia de contar con una líder “que está preparada para dar todas estas batallas” en este contexto de crisis provocados por las políticas económicas de Javier Milei.
“Más que dar un ataque contra Kicillof me preguntaría qué pasó con un apoyo explícito a la figura de Cristina en un cargo que tenía que ver con el ordenamiento partidario”, insistió Boudou y afirmó: “No estaba planteando ninguna disputa en el terreno electoral”.
Para finalizar, retomó una frase de Néstor Kirchner que rezaba que “lo único importante en la política es la nitidez”, y sentenció: “Me parece que en este tránsito le sobró Nitidez a Cristina y le faltó a otros compañeros y compañeras”.