Tras su visita a la ciudad de 25 de Mayo el pasado 27 de septiembre, cuando inauguró la Casa de la Provincia y entregó móviles policiales, entre otras cosas, el gobernador bonaerense Axel Kicillof desembarcó en  Norberto de la Riestra para observar la obra de dragado del río Salado.

Recibido por el intendente municipal Hernán Ralinqueo, el gobernador destacó el avance de los trabajos que beneficiarán a miles de productores  y ruralistas, y recordó que cuando asumió vio que la gestión anterior, la cual encabezó María Eugenia Vidal, había dejado los trabajos estancados. 

"Encontramos la obra abandonada y desfinanciada. Recuperamos el financiamiento perdido, la reactivamos y hoy estamos planificando su etapa final. ¡Una inversión estratégica para que la obra hidráulica más importante de la historia de la provincia sea una realidad!", ponderó el gobernador que busca renovar mandato.

Durante la recorrida que, también concentró al ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis, el titular de la cartera de Desarrollo Agrario de la Provincia, Javier Rodríguez, y el subsecretario bonaerense de Recursos Hídricos, Guillermo Jelinski; Kicillof habló de los beneficios que posibilitarán los trabajos de adecuación y dragado del cauce.

"Reducirán el impacto de inundaciones y sequías y mejorará las condiciones de producción en el noroeste y centro bonaerense", expresó . Asimismo, remarcó que "el Plan Integral de la cuenca del Río Salado es desarrollo y futuro para las y los bonaerenses".

Para concluir, Kicillof  repasó: "Es una obra estructural que estamos impulsando para transformar la realidad económica y productiva de 59 municipios en una región clave de nuestra provincia".