La jueza federal María Eugenia Capuchetti resolvió enviar a juicio oral y público a los tres presuntos coautores por el atentado a la vicepresidenta, Cristina Fernández Kirchner, ocurrido el 1° de septiembre pasado.

Se trata de los únicos detenidos Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, procesados como coautores de la tentativa de homicidio, y Nicolás Carrizo, supuesto jefe de ambos en la venta de copos de azúcar, acusado como partícipe secundario.

Así, la magistrada lo decidió incluso contra la opinión de la querella, representada por los abogados José Manuel Ubeira y Marcos Aldazabal, quienes consideraron que "elevar la causa a juicio por tramos es una práctica incorrecta y daña el descubrimiento de la verdad".

Además, Capuchetti rechazó el pedido de los abogados de profundizar en otras líneas de investigación, como la implicancia o no del diputado nacional del PRO, Gerardo Milman, o la relación con la agrupación Revolución Federal que se investiga en otra causa.

Por otro lado, el abogado defensor de Carizzo, Gastón Marano, le dió el visto bueno a la elevación a juicio oral; al igual que lo hizo el defensor oficial de Uliarte, Gustavo Kollman, antes de ser reemplazado en su labor por Carlos Telleldín.

¿Cómo fue el dictamen Capuchetti?

“En función de todo lo analizado, y toda vez que las defensas de Sabag Montiel, Uliarte y Carrizo no se opusieron a la elevación a juicio ni dedujeron excepciones, declárese clausurada parcialmente la instrucción de la presente causa con relación a los nombrados y elévese al Tribunal Oral Federal que por sorteo resulte desinsaculado”, indicó la magistrada en el dictamen difundido por la agencia estatal Télam.

Dicho esto, agregó: “Aún sustanciándose numerosas medidas, algunas de particular injerencia en la esfera privada de las personas (allanamientos, secuestros y requisas), no se han podido reunir elementos objetivos de contundencia que permitan superar el terreno de la mera conjetura respecto de las hipótesis que aquí de forma tan enfática se sostienen”.

En tanto, el fiscal a cargo, Carlos Rívolo, avaló la elevación a juicio de los tres detenidos, a su vez subrayó que siga la investigación en relación a esclarecer si hubieron o no autores intelectuales del atentado.

En este sentido, Capuchetti señaló la posibilidad de seguir investigando pero resaltó la necesidad de “superar la etapa de instrucción en torno a las personas que se encuentran detenidas, mientras que se continúa profundizando, en paralelo, en relación a las líneas de investigación pendientes (o aquellas que pudieran surgir a sugerencia de cualquiera de las partes, o de terceras personas)”.