

El proyecto que apuntaba a cobrar a las Petroleras y comercializadoras mayoristas de combustibles una nueva tasa que gravaría sus ventas a las estaciones de servicio, quedará congelado en el Senado bonaerense.
La decisión fue adoptada en las últimas horas por el gobierno de María Eugenia Vidal, ya que la nueva imposición iba a terminar generando un nuevo aumento en los combustibles.
Se trata de uno de los acuerdos que había logrado Sergio Massa en la mesa de negociación por el Presupuesto bonaerense, aunque el tigrense volvió a tener una negativa desde Gobernación, con el acompañamiento del endeudamiento consumado.
El proyecto había pasado el primer filtro legislativo y aprobado en Diputados. Pero en medio del reclamo de las petroleras, en el gobierno bonaerense afirmaron que no prosperará.
La norma apuntaba a cobrar una nueva tasa a las petroleras que gravaría sus ventas de nafta a las estaciones de servicio. Sería de un 0,25% de la facturación.