

Después que la titular de la Cámara de Diputados de la Nación, Cecilia Moreau, rechazara la medida impulsada por el magistrado, Martín Cormick, que impedía a la diputada radical Roxana Reyes asumir una banca en el Consejo de la Magistratura. La presidenta del organismo decidió poner en suspenso las designaciones al Consejo hasta no “encontrar una pronta resolución a este tema”.
Bajo ese escenario, varios legisladores de Juntos por el Cambio y de la UCR calificaron el accionar de Moreau como “un atropello a las instituciones”. Por su parte, el bloque del Frente de Todos emitió un comunicado respaldando a la titular del organismo.
Como respuesta, la diputada nacional de la UCR, Karina Banfi, afirmó en redes sociales que “violar las instituciones no es un tema de géneros. El kirchnerismo somete a una tensión inusitada a la República desde la Presidencia de la Cámara de Diputados que ostenta una mujer. No tenemos dudas de que un diputado varón también habría obedecido a CFK”.
Por su parte, la legisladora del FdT, Mónica Macha, salió al cruce y manifestó que “cuando las mujeres estamos en ejercicio del poder nos quieren disciplinar. Y ahora le pasa a Cecilia Moreau”.
Y agregó que desde el partido expresan su “respaldo incondicional a Cecilia que tiene la fuerza de tomar las decisiones necesarias para recuperar la justicia degradada por la Corte Suprema”.