El municipio de Pinamar quedó envuelto en un escándalo de corrupción que le estalló al gobierno de Martín Yeza. Dos funcionarias de la Secretaría de Desarrollo Social se transfirieron dos millones de pesos correspondientes a la Tarjeta Alimentar a sus cuentas bancarias.
A raíz del hecho, la Policía Federal allanó las sedes de las carteras de Deportes y Desarrollo Social y detuvo a seis personas, entre ellas dos funcionarias del jefe comunal, a quien apuntan por haberse transferido dos millones de pesos correspondientes a la Tarjeta Alimentar a sus cuentas bancarias.
Vale aclarar que la causa se inició tras la denuncia de la exconcejala y extitular de Desarrollo Social local, Nora Ponce y recayó en la fiscalía especializada en delitos de corrupción de Dolores, a cargo del fiscal Mario Rafael Pérez.
Fuentes policiales, dejaron entrever que la estafa al Estado lo protagonizaron dos funcionarias de la Secretaría de Desarrollo Social quienes robaron varios lotes de la tarjeta alimentar que no habían sido entregadas por la pandemia de Covid-19 y se las dieron a la pareja de una de ellas.
Los nombres de las funcionarias no trascendieron y habrían simulado en los posnet compras con las tarjetas por un monto total de $2.092.000 que luego transfirieron a cuentas personales en el Banco Provincia.
Luego de los allanamientos, un total de seis personas resultaron detenidas acusadas de “defraudación en perjuicio de la administración pública”, por lo que quedaron a disposición del juez de Garantías David Mancinelli.
Desde Desarrollo Social del municipio argumentaron que “se prestó colaboración con las autoridades requirentes a los fines del esclarecimiento de los hechos investigados”.
Por su parte, Yeza esgrimió que no tenía conocimiento de la situación y señaló que “nuestro equipo está a entera disposición de la justicia para que se esclarezcan los hechos y se determinen los responsables”.