El Gobierno de la provincia de Buenos Aires extendió el plazo de la oferta del canje de deuda bajo legislación extranjera hasta el próximo 26 de marzo. Así lo informó el Ejecutivo mediante un comunicado oficial.
El Ministerio de Hacienda y Finanzas, conducido por Pablo López, aseguró que extendió el período de presentación de órdenes para el canje los bonos elegibles bajo legislación extranjera por nuevos bonos hasta el 26 de marzo de 2021.
Asimismo, explicó que "el equipo económico continúa manteniendo diálogo con los acreedores privados externos con el objetivo de arribar a un acuerdo que sea sostenible y duradero en el mediano y largo plazo, y que tenga en cuenta la situación social, económica y fiscal de la Provincia".
Según el último informe de deuda publicado en abril de 2020, plantea que la Provincia mantiene una negociación con los acreedores por la deuda en ley extranjera, que supera los U$D 7.000 millones, y representa el 70% del endeudamiento total.
Cabe destacar que durante el año pasado no se pudo llegar a un acuerdo con los bonistas, desde la Gobernación bonaerense se busca tres años de gracia para afrontar los pagos, con una quita del 55% del interés, y del 7% del capital.
Durante febrero, el gobierno de Axel Kicillof puso énfasis en la necesidad de generar un desendeudamiento en moneda extranjera y lograr que la financiación sea a partir de deuda sostenible. En pesos y bajo ley local, o a través de organismos multilaterales de crédito. La negociación bonaerense es el estandarte para el resto de las provincias que se encuentran en una situación similar.
En este marco, en un encuentro entre el ministro López y sus pares de otras provincias se acordó la elaboración de un documento en el que existen siete puntos de consenso que servirán como lineamientos para "para lograr una deuda compatible con un sendero de crecimiento económico”.
Los puntos del acuerdo son restaurar la sostenibilidad de la deuda en el marco de procesos ordenados, promoviendo acuerdos que resulten sostenibles en el mediano y largo plazo; trabajar cooperativamente, brindándose apoyo mutuo según las necesidades de cada provincia; sostener un diálogo transparente y de buena fe con los distintos grupos de bonistas; alcanzar compromisos adecuados que brinden tratamiento equitativo entre acreedores, en función de las particularidades de cada lugar.
Además, el documento también indica que es importante evitar acuerdos que puedan acarrear beneficios individuales de corto plazo poniendo en riesgo la sostenibilidad del agregado provincial y con ello el interés del conjunto de los acreedores, incorporar en el análisis de sostenibilidad las implicancias del contexto macroeconómico y la disponibilidad de divisas para evaluar las posibilidades de pago de los servicios de deuda resultantes; avanzar en propuestas que permitan obtener flujos de pagos compatibles con senderos de resultado fiscal consistentes con una recuperación económica sostenida.