Mientras Juntos por el Cambio vislumbra sus grietas internas, quien aprovecha casi en silencio en lograr una ventaja es Emilio Monzó.
Buscando sacar provecho de la legitimidad con la que se retiró como Presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Monzó comenzó a caminar la Provincia de Buenos Aires y se desentiende de la conducción de Vidal en ese territorio. Incluso, desde su entorno destacan que fue la exgobernadora quién “no dejó hacer política a Emilio” en la Provincia.
Ahora, Monzó comenzó a dar pelea pensando en la carrera por la gobernación en 2023 y ya hizo sus primeros actos en la provincia de Buenos Aires.
Durante el fin de semana se mostró junto con intendentes radicales en busca de ir instalando su figura en el distrito. El encuentro fue en Rivadavia, con el intendente local, Javier Reynoso; además del de General Villegas, Eduardo Campana; Guillermo Pacheco, de Pellegrini; Martín Randazzo, de General La Madrid; Calixto Tellechea, de Florentino Ameghino; y Miguel Fernández.
Según le comentaron a este portal, el encuentro sirvió para “planificar estrategias para transformar estructuralmente a la provincia de Buenos Aires”.
Sin embargo, la clave puede pasar en lo que corresponde al debate legislativo, donde el monzoismo goza de 5 diputados y puede llegar a sumar alguno más. Incluso, darle la llave del Senado a Kicillof, aportando algunas senadores que hoy responden a JxC.