El lanzamiento del binomio Alberto Fernández- Cristina Kirchner generó un cambio en la estrategia de los principales dirigentes que aspiraban a la candidatura presidencial.
Uno de los más lanzados era Felipe Solá, quien desistió de su candidatura porque “el objetivo está cumplido”, que, se puede leer, era la unidad del Peronismo.
“Mi candidatura tenía una única misión: construir una unidad amplia para defender al trabajo, a los humildes y a la clase media. Ese objetivo está cumplido”, señaló en redes sociales.
En ese sentido, el líder de Red X Argentina añadió “celebro la decisión de Cristina. Felicito a Alberto”.