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Luego de una elección que puso a la izquierda como tercera fuerza política y consolidada en la Provincia de Buenos Aires, sus dirigentes comenzaron a marcar la diferencia con la polarización instalada en la sociedad.
En ese sentido, Juan Carlos Giordano, diputado nacional del Frente de Izquierda y de Trabajadores - Unidad (FIT-U), realizó un balance electoral de los comicios con Diagonal a Contramano, destacando el logro de bancas en la provincia de Buenos Aires y la importancia de la unidad y coherencia de su espacio.
Giordano subrayó que, a pesar de la fuerte polarización que concentró el 75% de los votos entre La Libertad Avanza (LLA), el PRO y el peronismo, el FIT-U logró sumar aproximadamente 900.000 votos a nivel nacional, considerando el recuento de todas sus listas provinciales.
Un logro significativo fue en la provincia de Buenos Aires, donde el FIT-U consiguió dos diputaciones. El diputado señaló que superar el piso electoral de 400.000 votos era un gran desafío, y al lograrlo, se conquistó una segunda banca que será compartida y rotada por Nicolás del Caño y Romina del Pla.
Giordano destacó que en la provincia de Buenos Aires y en otros distritos, el Frente de Izquierda fue la tercera fuerza. Afirmó que el FIT-U ha superado en muchos distritos fundamentales a la llamada "tercera vía" de los gobernadores (como los de Córdoba y Santa Fe), a quienes calificó como "amigables a Milei" y que vienen colaborando para garantizar la gobernabilidad del oficialismo.
Según Giordano, la buena elección de la izquierda se debe a dos factores clave. Por un lado, la unidad de la izquierda, a la que consideró la mayor unidad conquistada en los últimos 14 años. Por otro lado, la coherencia y consecuencia de haber enfrentado el plan motosierra del gobierno, apoyando las luchas en las calles y en el Congreso.
Giordano fue muy crítico con la CGT y sectores del peronismo. Sostuvo que el gobierno de Milei “ha logrado avanzar por la complicidad de la CGT, que ha dejado sola en las luchas” al no convocar a un paro general. Cuestionó la estrategia de esperar el desgaste de Milei para capitalizar políticamente, señalando que esta no ocurrió y, por el contrario, ha dejado en crisis a sectores del peronismo.