La famosa “ancha avenida del medio” que inauguró Sergio Massa en 2013 se convertió en un laberinto de callejones sin salida en la provincia de Buenos Aires. Atrapados entre el peronismo y el oficialismo libertario, una gran cantidad de dirigentes radicales, peronistas no kirchneristas y vecinalistas buscan un rumbo común, pero por ahora solo reina la desconfianza.
En este escenario, la Unión Cívica Radical (UCR) bonaerense busca ponerse al frente y convocó a una Convención provincial este martes en La Plata para definir su estrategia electoral.
El radicalismo, conducido por el exintendente Miguel Fernández y el dirigente Pablo Domenichini, buscan saltar la grieta y definen en el Comité Central la discusión para afrontar la elección de septiembre.
Para eso, sacan a relucir su peso territorial: 27 intendentes, más de 200 concejales y una veintena de legisladores. Casi al unísono, los alcaldes y las convenciones seccionales definieron recuperar “la histórica” lista N°3.
Sin embargo, hay quienes ven en una alianza con parte de vecinalistas y los peronistas díscolos una tercera vía que sintetice un frente antigrieta, con intendentes como Fernando Gray (Esteban Echeverría) y Julio Zamora (Tigre), pero dirigentes como Juan Zabaleta y hasta Facundo Manes, quién abrió negociaciones para retornar al partido.
A pocos días del cierre de alianzas, el espacio del centro sigue sin un liderazgo claro y con múltiples caciques que desconfían entre sí. La Convención radical de este martes será clave para empezar a ordenar el rompecabezas. La gran duda es si lograrán construir un frente unificado o si, por el contrario, la "avenida del medio" llegará a las elecciones dividida en varias facciones, repitiendo los errores del pasado.