La Unión Cívica Radical (UCR) de la provincia de Buenos Aires llevó a cabo su Convención provincial para delinear el rumbo político del partido. Con una serie de encuentros seccionales, los boina blanca avanzaron en la determinación de la estrategia que se resolverá en los próximos días.
Con la participación de sus principales dirigentes, legisladores e intendentes, el radicalismo bonaerense buscó enviar una señal clara hacia el electorado, aunque con dudas sobre el rol que deberá asumir.
Fuentes del partido aseguraron que el objetivo es “fortalecer la identidad radical” como una fuerza de moderación y gestión, capaz de convocar a sectores más amplios de la sociedad que no se sienten representados por la polarización.
Hay quienes se ilusionan con la idea de recuperar la histórica lista N° 3, que llevó el radicalismo en sus insignias y que no se usa desde el 2003, cuando el candidato presidencial de Leopoldo Moreau cosechó un magro 3% tras la salida anticipada de Fernando De La Rúa.