En medio de las negociaciones para aprobar el Presupuesto 2025, el bloque UCR + Cambio Federal y un alfil PRO de la Legislatura bonaerense pusieron sobre la mesa una de sus exigencias para poner su voto. Se trata de un proyecto para garantizar la autarquía financiera y administrativa del IOMA.
La iniciativa propone una modificación del artículo 12 de la Ley del IOMA (N°6.982), que establece que la Provincia debe transferirle los fondos a la obra social bonaerense antes del día 15 de cada mes con el objetivo de que “sea autosuficiente en términos financieros y administrativos”.
De esta manera, la mutual podría disponer del uso de fondos sin que ingresen antes a la Tesorería bonaerense. Así, explicaron, aumentaría la disposición de recursos para restablecer los servicios y mejoraría la capacidad de planificación y acción independiente del IOMA.
“La autarquía es una herramienta que puede garantizar una mayor capacidad de acción y de gestión en beneficio de los afiliados”, afirmó el diputado radical Diego Garciarena, quien reprochó: “Hace más de un año que estamos reclamando por el abandono que sufren los afiliados”.
Días atrás, Garciarena y su par del PRO, Fernando Rovello, se reunieron con afiliados del IOMA de Mar del Plata, que denunciaron fallas en el servicio y la falta de cobertura. Sumado a la situación que se vivió con FEMEBA durante el 2024, salieron disparados a meter el proyecto.
Por eso, uno de los reclamos de la oposición durante el fallido tratamiento del Presupuesto, fue la autarquía de la obra social que conduce Homero Giles. Con el oficialismo preocupado por conseguir esa herramienta clave, el radicalismo presiona para concretar uno de sus proyectos.
Según los autores de la iniciativa, con la autarquía del IOMA se asegurará una gestión “más eficiente y enfocada en los afiliados”, en contramano a la gestión que se lleva adelante en la obra social, que “abandonó el modelo sanitario que asegura un rápido acceso a la prestación médica”.
En suma, propusieron el proyecto con el fin de implantar el modelo financiador por sobre el “ya fracasado” modelo prestador, que conllevaría a una correcta auditoría de la gestión de la obra social, a privilegiar la medicina preventiva y aumentar la cobertura en medicamentos.
“La autarquía del IOMA es fundamental para asegurar no solo un manejo eficiente sino también un servicio adecuado que responda efectivamente a las necesidades sanitarias”, explicaron y cerraron: “La salud es un derecho fundamental y la gestión gubernamental tiene que dar respuestas claras, positivas e inmediatas”.