La primera sesión del año del Senado fracasó luego de que la oposición se retirara del recinto con gritos hacia sus pares y hacia la presidenta provisional del Cuerpo, Claudia Ledesma, quien exigió la obtención de una mayoría agravada para habilitar el cambio del temario que Juntos por el Cambio y Unidad Federal querían imponer.
Ledesma emitió un decreto de convocatoria con un temario con iniciativas pedidas por todos los espacios y con proyectos que no estaban solicitados, entre ellos la ley de Alcohol Cero, los acuerdos para completar vacantes en la Justicia Federal de Santa Fe y de Córdoba, y la Ley Lucio.
En ese escenario, el presidente del bloque de JxC, Alfredo Cornejo, apuntó: “Han sacado un decreto de convocatoria que arbitrariamente han puesto y en el orden que se les ocurrió”, y pidió una moción de orden para priorizar los temas que pidió la oposición, y postergar los otros proyectos para el 13 de abril.
Estalló el conflicto
El pedido de Cornejo hizo subir la temperatura del recinto, y fue el puntapié para que el oficialismo saliera a la carga y los acusara de querer “impedir” el tratamiento de los temas.
Por su parte, el presidente del bloque del FdT, José Mayans, lanzó: “Hay una presión y una utilización de oportunidades para decir ‘solo tratamos nuestros temas’”, y le pasó la factura a la oposición por la falta de trabajo en las comisiones: “Este año vengan, ya que van a lucir su mayoría, lúzcanla”.
El debate subió de tono hasta que Ledesma intervino para someter a votación un pedido de alteración de reglamento ante la solicitud de cambiar el orden, para lo cual se requieren dos tercios de los votos.
"Es la decisión de Presidencia”, exclamó ante los gritos de Cornejo y lanzó: “Denúncieme si cree que no tengo las facultades”. Luego, la oposición resolvió abandonar el recinto.