En la previa de un nuevo ruidazo para reclamar por los aumentos de tarifas en servicios esenciales, como energía, agua y gas, el precandidato a intendente de La Plata y juez suspendido por poner trabas a los aumentos de tarifas, Luis Arias dialogó con La Letra Chica.

¿Cómo ves el ruidazo en todas las ciudades del país?

Parece que hay un cierto consenso en salir a reclamar frente a esta situación qua ha dejado a muchas personas en la imposibilidad de hacer frente a los aumentos de servicios esenciales y que, además, ha provocado la pérdida de puesto de trabajo.

Muchísimas industrias pequeñas o pequeños comercios, no pueden subsistir con tarifas altas. Son consumidores intensivos de energía eléctrica o de gas y no pueden subsistir con tarifas altas.

Nosotros la divertíamos lo decíamos en 2016 y lo habíamos verificado con los primeros aumentos tarifarios donde, por ejemplo, Cerámica Zanon, una fábrica recuperada, facturaba 12 millones de pesos y le llegó 10 millones de gas y 1 millón de electricidad, en aquel tarifazo de 1400% que quisieran hacer de golpe y que después tuvieron que retractar.

Creo que la situación de la mediana y pequeña empresa es tremenda, porque son los que dan el 80% del trabajo del país.

El 80% de la población tiene trabajo por la pequeña y mediana empresa que, por el aumento tarifario por la apertura a las importaciones, y la merma en el consumo interno, va cerrando día a día y dejando miles de personas en la calle.

¿Desde el rol que te toca ocupar, cómo ves los aumentos de tarifas sostenidos a los bonaerenses o en la ciudad de La Plata, la cual tenés ganas de representar?

Lo veo como una gran estafa. Creo que es una gran transferencia de recursos de los usuarios hacia las empresas de servicios públicos, todos cercanos al gobierno.

Como Nicolás Caputo con Central Porto, por ejemplo. Una de las empresas más importantes del ámbito energético, que facturó en 3 meses 7500 millones de pesos; Rogelio pagano, en la provincia de Buenos Aires, que compró todas las distribuidoras eléctricas, las 4 distribuidoras eléctricas que están previstas por la ley, como de Edén; Edelap: Edes y Edea que a través de su empresa, DECSA, que era distribuida en Salta, compró las 4, luego aumentaron la tarifa y finalmente el año pasado tuvo una ganancia de 10500 millones de pesos, mientras la gente no puede pagar sus boletos.

Creo que hay en empresarias que se han enriquecido indebidamente. Las acciones de las empresas han subido, en algunos casos, más de 200% en dólares y en algunos casos ha subido hasta en 21 veces en dólares.

Es impresionante lo que ha subido el valor de las acciones y crecen porque tienen ganancias exorbitantes, entonces se benefician doblemente. Se benefician porque sus acciones valen mucho más, se capitalizan y se benefician porque tienen ingresos exorbitantes.

Esta es la situación de Nicolás Caputo; de Marcelo Mindlyn; de Rogelio Pagano todos empresarios cercanos al gobierno que están ganando millones, mientras la sociedad se empobrece y no puede pagar sus tarifas.

No es que la tarifa salga cara por los subsidios o, por el crecimiento del sistema que lo requiere o, que hay que hacer inversiones, sino que salen caras para llenar las cuentas bancarias unos pocos amigos del gobierno.